La felicidad...Ese tesoro que todo el mundo valora como invalorable...esa sensación que algunos se pasan la vida buscando como si de una veta inmensa en mina desconocida, se tratara...ese bienestar espiritual del ser que nunca mira cuánto tienes, ni lo que eres...Simplemente....llega...en dosis imperceptibles, para muchos, la mayoría, los que miran si ver, los que ven, sin sentir...Cómo, caprichosa, se oculta en una canción, en algún olor, en el contacto furtivo de alguien al que se ama, tras un día soleado, de una sonrisa, de un beso encadenado...Que te toca, te envuelve, embriagándote, abrazándote tiernamente...Y cuando empiezas a sentirla, apenas aprendes a amarla, se aleja, sin despedirse, de repente...Sin más. Y pobre del que la busque con desesperación porque ella solo vuelve, furtivamente, cuando menos lo esperas, cuando tu desasosiego se calme, cuando vuelvas a verla, de reojo, en una canción, en algún olor...
http://youtu.be/cgqOSCgc8xc
A lo mejor, solo a lo mejor, disfrutamos tanto de estos momentos porque siempre nos llegan de sorpresa y son breves.
ResponderEliminarSerá por mi cibertarugismo seguro, pero no puedo ver el vídeo!
Pasa el ratón sobre el enlace, remarcándolo, copia y pega en el propio youtube y ya ta ;)
ResponderEliminarCuanta razón tienes y que preciosa manera de decirlo. Besets desde Valencia
ResponderEliminarMarta, gracias por tus palabras y por tu cariño. Es mucho, ese mismo cariño que tu te mereces y que tienes que recibir. Eres una gran persona, una gran chica, vuela, vive, sigue sintiendo, para que la felicidad te sorprenda cuando menos lo pienses.
ResponderEliminarUn beso de oso astur
:-)Gracias, eres un cielo. besetes
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